Los restos de un hombre descuartizado fueron hallados ayer en avanzado estado de descomposición entre unos cañaverales ubicados en inmediaciones del barrio Municipal de Concepción. Se trata de la zona conocida como “El Chiquero de Farías”. Aunque el cuerpo se encuentra irreconocible, hay indicios de que podría tratarse del trabajador rural Matías Emanuel Medina (33 años) que se encuentra desaparecido desde el 20 de abril.

El hallazgo fue realizado por unos obreros rurales que estaban cosechando la caña a borde de una máquina cerca de las 13 de ayer. La zona donde aparecieron los restos, es cercana a la zona donde los investigadores sospechaban que podría haber sido cometido el crimen.

El sitio del hallazgo está cerca del lugar en que fue encontrada, a días de su desaparición la moto Honda CG en la que Medina había salido para cobrar el haber que percibía como cosechero del limón. También está ubicada a apenas seis cuadras de la vivienda en que vivía con su esposa Nadia Gómez, con la que tuvo dos hijos, y a cuatro de la de su madre adoptiva Cintia Oviedo.

No es menor el dato de que además a menos de 500 metros Medina estuvo por última vez con unos allegados. Por este caso están procesados y con tres meses de prisión preventiva José “Fuerte Apache” Avila, Walter Farías y Mauro Saavedra por el delito de robo y privación ilegítima de la libertad.

En tanto que Gustavo “Guchi” González, Leandro Saavedra, Oscar Alincastro y Gabriela Luna, están acusados de encubrimiento.

ANÁLISIS. El fiscal Miguel Varela dialoga con un perito del ECIF.

El trabajo de investigación que lleva adelante el Fiscal Miguel Varela, de la Unidad Fiscal de Delitos contra la propiedad y las personas, estableció que Medina había participado en la noche de su desaparición de una reunión en una vivienda ubicada en inmediaciones de “El Chiquero de Farías”. Ahí estuvieron los ahora aprehendidos. En ese lugar se habrían desarrollado los pormenores que habrían terminado con el final violento del joven jornalero. La que dio datos sobre la posible ubicación de éste, a pocos días de su desaparición, fue Luna.

Los pesquisas fueron orientados en las inmediaciones del sitio en que ahora fueron hallados los restos. Pero en ese entonces pese a los intensos rastrillajes realizados, incluso con perros adiestrados, no se encontró nada.

Gritos

Al lugar en que fue encontrado el cadáver descuartizado se llega por calle Gervasio Artigas última cuadra, al este de la ciudad. Parientes de Medina, bien conocida la noticia del hallazgo, rápidamente se concentraron en la zona y dieron por sentado que los restos se tratan de Matías.

“¿Por qué le hicieron esto, por qué?”, se preguntaba a los gritos y entre llantos Cristina Medina, madre biológica del joven. Otras escenas desgarradoras la protagonizaron sus hermanos y tías, pese a que el abogado de la familia, David Maldonado insistía en aclarar que “no se puede aventurar nada de quien es, porque está irreconocible el cuerpo”.

¿VÍCTIMA? Matías Medina fue visto por última vez el 20 de abril.

Tras el hallazgo la familia aseguró que el difunto no se encontraba en ese lugar los días en que efectuaron el rastrillaje. “Anduvimos por esta zona recorriendo surco por surco y no encontramos nada. Por eso creemos que lo tiraron aquí hace poco”, dijo Oviedo.

Los Medina apuntan como principales responsables de la desaparición y presunta muerte de Matías a Luna y Farías. La tensión que se vivió en la zona obligó a la policía a reforzar la guardia en el lugar con efectivos de Infantería de la Regional Sur.

De Varela

El fiscal Varela, en tanto, ordenó la intervención del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF) a fin de que este proceda al estudio y análisis de los restos humanos hallados. “Se perimetró el lugar a los fines de preservarlo hasta el ingreso de personal a cargo de las pericias.

Consultado por la identificación y si corresponderían al joven desaparecido, este dijo que “se puede hacer un reconocimiento de las prendas con los familiares que estuvieron en contacto con él por última vez, pero lo más certero será el estudio de ADN, lo cual llevará su tiempo para su cotejo con los restos hallados”.